lunes, 23 de junio de 2014

Cuaderno de bitácora

Cuaderno de bitácora de Erika M. O. (1º ESO) :             
"Todo empezó con una  frase:  Afilar un lápiz   puede cambiar tu vida,
esa frase me enseñó a disfrutar las pequeñas cosas, a vivir cada momento como si fuera el último y a ser mejor persona. Ser uno mismo es importante porque somos únicos. Aprender a respetar a los demás fue lo mejor que hice. Ahora a final de curso sé mucho más que al principio."
       


        En realidad, esta aventura comenzó cuando el profesor Salvador Barco instó a sus alumnos a iniciar un cuaderno de bitácora. En él han ido anotando sus impresiones durante tres grandes recorridos basados en el autoconocimiento y su expresión artística. Primero fue el lápiz como una prolongación del ser, después la máscara con su ambivalencia de la expresión y la ocultación y, por último el viaje  a Ítaca, un viaje que no tiene fin. A partir de ahí las zonas comunes del instituto comenzaron a poblarse de imágenes de un mundo sumergido, acuático: 



habitado por hermosas y peligrosas sirenas:



o un extraño Neptuno con una bufanda rojiblanca  soñando frases del siglo XXI:




Y ante el temor de estar perdidos, sabios consejos:







sin olvidar los efectos de  la música:



   Además, siempre es agradable llegar a buen puerto, tomarse un descanso, ver la floración de los árboles y, por supuesto,  seguir nadando o caminando en buena compañía.



¡Gracias a todos los que habéis  participado y  disfrutado!

jueves, 19 de junio de 2014

Entrega de premios y menciones


El viernes 20 de junio a partir de las 10:30  de la mañana 
se entregarán en lo que fue la  biblioteca los premios y menciones de:
Ajedrez
Olimpiada filosófica
Olimpiada de lenguas clásicas
Taekwondo 
Certamen literario

lunes, 16 de junio de 2014

Premio Príncipe de Asturias 2014

               

El Premio Príncipe de Asturias de 2014, último con esta denominación (¡hay que ver lo que provoca una abdicación!), ha recaído en dos escritores a la vez: el irlandés John Banville y el americano - diríamos que nacido en Chicago - Benjamín Black. El día y la noche, la novela intimista y la novela negra, pero ambos representante de análisis complejos del ser humano, de reflexiones inteligentes y originales de los secretos del corazón humano.

Dos escritores que se enfrentan/afrentan mutuamente. Se ha dicho que el verano es de Benjamin Black y el otoño, la estación más fértil, de John Banville. Black escribe en ordenador, sin reescrituras, tres meses de trabajo le bastan para terminar sus novelas. Banville escribe con inevitable lentitud, tarda entre tres y cinco años en poner el punto final. Black es un artesano; Banville, un artista. Black es de la escuela de Chandler, de Hammett, el suyo es un retrato de un mundo regido por una amoralidad en la que podría respirar a sus anchas Tom Ripley, el gran antihéroe de Patricia Highsmith.   Sin embargo, Banville posee una narrativa cargada de un lirismo exultante, al que algunos consideran algo meloso, pero siempre hay en él un “ascua de veras en ese incendio de teatro”.  Banville no se encarcela en su propio estilo, es decir: su estilo no es un fin en sí mismo, sino un vehículo para llegar a alguna parte. 

Decía Roberto Bolaño que la literatura era tener el valor, sabiendo previamente que vas a ser derrotado, de salir a pelear. Es transitar esa frontera donde realidad y ficción se difumina. Recientemente decía Banville: 'Yo no soy un personaje de tu libro; soy una persona real'. ¿Una persona real? Deberíamos decir esas palabras en voz muy baja. El artista es una especie de caníbal: consume realidad, se la come, la usa, moldea material que saca de otros. Como de alguna manera hace también un actor. Todo eso supone un riesgo. Y hay que asumirlo y disfrutar de la aventura".

Dos visiones de la literatura, dos modos de enfocar el arte narrativo que se complementan y a veces se oponen ( ¿o es al revés?). Este Premio retrata un juego al límite, una forma visceral de enfocar las palabras, en ese reto eterno de la página en blanco...Un premio  como el Príncipe de Asturias, compartido por estos dos escritores, que se miran al espejo de los reflejos y cada uno devuelve la imagen del otro. ¡Mira que si al final no fueran tan diferentes!  Incluso más, ¡ mira que si al final fueran la misma persona! ¡...Esto de la literatura es cosa de locos!

martes, 10 de junio de 2014

A trompicones por África


Sipnosis:

Justo el día en que la diosa Fortuna se toma unas necesarias y merecidas vacaciones, un novato en África, experton en ‘’vender castillos en el aire’’, es capaz de convencer a su mejor amigo, al sobrino de éste y a cuatro desconocidos y experimentados viajeros para que inicien junto a él un largo viaje –que promete no olvidarán jamás- en busca de lo que queda de un árbol que en su día fue famoso en el lejano desierto del Teneré.


Un libro en el que el propio autor, Mario Montoro, narra sus aventuras en moto junto a unos compañeros de viaje. Con Manolo y Sebas en moto, y los otros en 4x4. La verdad esque a mí me parece un libro increíble porque te transporta a esos lugares mientras lo lees, te hace pasar por esas aventuras en moto (yo, algún día tendré una e intentaré hacer viajes como ése, porque estoy de acuerdo con él en que aunque a veces sea más peligroso, vayas solo y sea menos cómodo ir en moto,  es ir contigo misma/o. Tú y la moto sin ningún suplemento más). También enseña las durezas del sitio y a la vez la belleza de éste (que en www.atrompiconesporafrica.com se muestra claramente).
 Uno de los sitios por donde pasa y que mejor me parece es Malí.
<<Malí me ha servido para demostrarme a mí mismo y al resto de escépticos, que no daban ni un duro por mi candidatura en solitario, que querer es poder(…)>>
(Esta, para mí, es una de las mejores fotos, es espectacular, la tomaron en Malí)



 Lo bueno del libro es que es que tiene un vocabulario muy ameno y muy coloquial que  hace más divertida una aventura así (auque creo que hay algunas páginas de relleno, pero en general no se hace nada pesado el libro)
Lo triste es que conocieron a personas increíbles a quienes  no volverán a ver seguramente. Dos héroes que me dejaron muy sorprendida, bueno dos y más pero sobre todo dos.
Por Nouadhibou se encontraron a un mauritano que les guió y los llevó a lo que era un ‘’colegio’’ lleno de niños sin apenas material. Este hombre los guió hasta un punto y después se volvió al colegio andando con apenas una botella y con varios kilómetros por delante.
<<Para mí, eso sí es un héroe y no los de pacotilla que un día sí u otro también nos intentan vender por todos lados>>
Y el otro en Chingetti, el creador del hospital "La Fraternidad" un español que se había volcado en ese lugar para ayudar a todas esas personas que más lo necesitaban.
Es agradable ver que al menos hay partes en el mundo donde la hospitalidad sí abunda, aunque esos sitios, justamente, sean los que más necesiten las hospitadad de otros. Allí se encuentra a muchísima gente dispuesta a ayudarles.

Y hablando sobre los componentes del grupo, los que más me han gustado son Luisa (o Jutha), Amparo (Power) y Manolo.
Empezando por Luisa, una mujer fuerte y que afronta las temeridades, muy valiente y con experiencias muy grandes recorriendo el mundo. Amparo es otra mujer increíble que enseña que todo es posible y que las cosas con esfuerzo se consiguen, las historias que cuenta sobre ambas son de admirar. Y bueno, Manolo me ha encantado porque es un punto muy gracioso en el libro, y es el típico amigo que brinda toda su ayuda siempre, de esos que no abandonan y que hacen cualquier cosa por el otro. Mario es como el soñador temerario y Manolo el soñador pero con precauciones, con ’sesera’. (Y menos mal que consiguió un chubasquero para Mario antes de ir al viaje)
Algo que me encantó es el asombro que encontró Amparo en las fotos que hacía a las personas de allí, que a mi me parecen fotos increíbles.
 << (…), llegaba la hora de rendir pleitesía a este símbolo arrancado al Teneré>> Al final alcanzan su meta de ver el gran árbol, el primero en colocarse en un mapa.
<<sentí, con pena sincera, que nunca las despedidas son buenas (…)>>
Esté libro también te enseña a que hay que tener mucho cuidado en esos lugares, pues puedes tener problemas y las cosas pueden salir distintas a como pensabas, en Agadez se ve muy claro.
Creo que por muy diferente, a lo que él esperaba, que acabase el viaje, fue algo alucinante de lo que nunca se debería arrepentir de haber hecho, y seguro que no lo hace.
 
Alicia Ruiz García 3ºB

jueves, 5 de junio de 2014

Olimpiada de Lenguas Clásicas

Si hace unos días nos hacíamos eco de la exitosa participación de una de nuestra alumnas en la I Olimpiada Filosófica de Andalucía, no podemos menos ahora que felicitar a dos nuevas alumnas de segundo de Bachillerato por su brillante papel en la VIII Olimpiada de Lenguas Clásicas convocada por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Málaga y celebrada el pasado 25 de abril.

La alumna Blanca Jiménez Alarcón, juiciosamente tutelada por nuestra compañera Loli Sánchez Contreras, se ha alzado con el segundo premio en la modalidad de Griego. Un meritorio tercer puesto fue ocupado por Paula García Fernández. Ambas demostraron un alto conocimiento teórico y una destacable claridad mental a la hora de enfrentarse a las pruebas.

Ayer, día 4 de junio, se celebró la ceremonia de entrega de premios. Blanca Jiménez Alarcón recibió como merecido reconocimiento un lote de libros así como un cheque regalo. Le deseamos que siga disfrutando con su relación privilegiada con la Cultura Clásica y dejamos aquí unas fotos para el recuerdo.