En los últimos años, cada vez es más frecuente el uso del cortometraje como vía de expresión creativa. Un corto tiene muchas ventajas: es breve, directo, es la imagen al servicio de una historia que contar y, como no hay fórmulas estrictas, permite una mayor libertad en cuanto a forma y contenido.
Algunos, no necesitan ni palabras y sin embargo transmiten con intensidad y dinamismo lo que desde el punto de vista literario denominamos cuento.
Es fácil encontrar en YouTube ejemplos tan sugerentes para un análisis como:
El vendedor de humo:
The fantastic flying books:
3 comentarios:
El corto de los libros voladores es extraordinario, me ha venido muy bien para la formación de usuarios ;)
Además con el alumnado funciona muy bien.
Benito, a mí me va a venir de maravilla la selección que has preparado de minicuentos de miedo, la recomiendo: http://blogbibliotecaiestorreatalaya.blogspot.com.es/. Si me das permiso, me aprovecho y hago una entrada ;)
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