sábado, 12 de noviembre de 2016

El comentario crítico


A veces esperamos que un  buen comentario crítico surja simplemente al empezar a escribir, como por arte de magia. Sin embargo, tenemos que tener en cuenta una serie de factores que condicionan esta actividad: es un examen y hay que hacerlo un día en concreto, estando o no en nuestro mejor momento,  justo después de leer un texto que llevamos un curso esperando y además tendremos que añadir  la presión de la hora y media para resolver por completo el ejercicio. No hay recetas mágicas pero sí  podremos mejorar con algunas prácticas.

LO PRIMERO ES TENER HÁBITOS DE ESCRITURA. Enfrentarse a un texto y volcar en un folio con palabras pensamientos que están en nuestro imaginario es una tarea ardua y compleja, sobre todo porque nuestra intención  va a ser que quienes nos lean, nos entiendan. Tendremos que ejercitarnos para que los demás  comprendan el alcance y la profundidad de nuestro escrito. ¿Cómo lo conseguimos? Pues gracias a las palabras.  Y escribo “gracias” porque ellas van a ser nuestras aliadas y no las enemigas, ellas serán nuestra carta de presentación y el vehículo idóneo para expresar lo que somos.  
Muchas veces un buen nivel de pensamiento crítico puede darse gracias a una reflexión previa. Para ello son muy socorridos los aforismos o simplemente una frase ocurrente de un buen escritor o de una personalidad a la que admiremos. Por ejemplo, para demostrar mi idea anterior puedo utilizar esta cita de Leonard Cohen:   Los niños muestran sus cicatrices como medallas. Los amantes las usan como secretos que revelar. Una cicatriz es lo que sucede cuando la palabra se hace carne. De eso tiene que estar compuesto vuestro comentario: de pensamiento y corazón  para que las palabras cobren vida.

      Os animo a que penséis y escribáis  vuestras frases favoritas tratando de buscar  aquellas que tengan utilidad para los temas generales que suelen utilizarse como punto de partida en los exámenes: la intolerancia,  los cambios en la sociedad, los valores del ser humano, el capitalismo, la enseñanza, el amor,  la inmigración,  las lenguas y las fronteras,  la compasión…
       Pensad lo maravillosa que puede ser una conclusión  con una frase como esta de Virginia Woolf:

No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente.

viernes, 11 de noviembre de 2016

Se ha abierto el plazo de inscripción para un nuevo certamen literario en la Axarquía. Os dejo las bases por si es de vuestro interés:

 Si queréis realizar la inscripción, pinchad en el siguiente enlace: http://www.axarquiajoven.com/