martes, 30 de abril de 2013
jueves, 25 de abril de 2013
Primer Amor
Mi «pasión» empezó ese día. Recuerdo que sentí algo parecido a lo que debe sentir un hombre que ha encontrado un empleo: dejé de ser simplemente un joven adolescente para convertirme en un enamorado. He dicho anteriormente que desde aquel día empezó mi pasión. Podría añadir que mis sufrimientos también empezaron ese mismo día. Sufría en ausencia de Zenaida. Mi mente no podía fijarse en nada y todo se me caía de las manos. Durante días enteros pensaba obstinadamente en ella... Sufría... pero en su presencia me sentía más aliviado. Tenía celos, comprendía que era poca cosa para ella, me enfadaba tontamente y tontamente me humillaba. A pesar de todo, una fuerza irresistible me llevaba hacia ella, y cada vez que traspasaba el umbral de su casa sentía una bocanada de felicidad. Zenaida comprendió en seguida que estaba enamorado, y yo no pensé nunca en ocultarlo. Ella se reía de mi pasión, jugaba conmigo, me mimaba y me hacía sufrir. Es dulce ser la única fuente, la causa tiránica e inapelable de las grandes dichas y de la desesperación más honda de otro ser, y yo era, en manos de Zenaida, como la blanda cera.
Capítulo IX
Selección del texto realizada por Inmaculada García Ruiz .
viernes, 19 de abril de 2013
"Me abraso en amores..."
Descubren en Toledo una carta de amor de hace más de 300 años:
Ya que he merecido, de manos de vuestra merced, tan gran favor, es
necesario que me sepa aprovechar de él. Lo primero que respondo es que
yo nací para servir (a Vmd.) pero no para mandar; lo segundo, digo que
el no haber hecho lo que Vmd. me mandó ha sido por causa de no avispar y
así pido perdón de lo mal hecho. Lo tercero, digo que cuanto más me
cansase Vmd. recibiré tanto más favor, y he estimado mucho el favor de
haberme alcanzado los papeles. Y a Pepita, cuando Vmd. la bese, le dará
Vmd. dos besos más, uno por mí, y otro por D. Juan, y como dije en
cuanto a la letra, no la he visto mejor de mujer, y lo que encargo es
que se acuerde de mí estando ausente, y para qué se han de gastar entre
los dos circunloquios, porque es mi afición tanta a Vmd. que me abraso
en amores, y así, querida mía, digo que, así en ausencia como en
presencia, siempre me abraso, y si mucho me estima Vmd. mucho más
estimo, y amo a Vmd. Sea la gracia a Vmd. y felices siglos.
Toledo y octubre, a 29, 1700.
Tu amante del corazón.
D. Alfonso Vargas y Montes
La mi Señora y querida Dª. María de Sierra
Por haber escrito deprisa, no se explica más mi afectuoso amor para con Vmd.
Para mañana, siendo Dios servido, espero la respuesta.
Tu amante del corazón.
D. Alfonso Vargas y Montes
La mi Señora y querida Dª. María de Sierra
Por haber escrito deprisa, no se explica más mi afectuoso amor para con Vmd.
Para mañana, siendo Dios servido, espero la respuesta.
Más información en : El Huffington post
miércoles, 10 de abril de 2013
Es inevitable no sentirse triste ante la pérdida del gran escritor y economista José Luis Sampedro. Según él mismo afirmaba se fue a coger el tren porque ya estaba cansado de estar apeado en esta estación que llamamos vida. Títulos como La sonrisa etrusca permanecerán por siempre en nuestro recuerdo. Los que lo conocieron personalmente destacaron de él su sencillez y cercanía.
Un gran sabio que aceptaba la muerte como parte de la vida. Descanse en paz.
viernes, 5 de abril de 2013
Ya está la glicinia en flor
MEMORIA DE LOS DÍAS
Vas y vienes en la memoria de los días
en los que el amor
rodeó la casa de luz matutina.
A veces sabíamos de ti por el aroma
de las glicinias deslizándose por el muro,
otras por el rumor del verano junto
al oro viejo de los plátanos.
Vas y vienes. Y cuando regresas
tu perro es el primero en saberlo.
Al oírlo ladrar, sabíamos que contigo
el amor también había vuelto a casa.
Eugénio de Andrade
Suscribirse a:
Entradas (Atom)